ℹ Información revisada y actualizada en abril de 2021

 

Es posible que hayas oído hablar del Compliance y de la Auditoría Interna, áreas de una organización que trabajan de forma independiente, pero que a su vez se complementan para lograr la excelencia y mejorar la competitividad. En este post te contamos cuáles son sus diferencias y similitudes.

Diferencias entre el Compliance y la Auditoría Interna

El Compliance es un conjunto de procedimientos y buenas prácticas que la administración de una empresa establece con la finalidad de protegerla. Asimismo, también implanta una serie de normas relativas a la actuación de los terceros que se relacionan con ella, para prevenir y, en su caso, hacer frente a los delitos y otras prácticas incumplidoras. Por tanto, el Compliance está relacionado con la conducta humana.

Por su parte, el propósito de la Auditoría Interna es comprobar que las políticas y procedimientos establecidos por la organización se cumplen con el objeto de proteger los activos y derechos de la misma. Desarrolla su actividad de forma independiente y aporta un enfoque sistemático y disciplinado con el fin de evaluar y mejorar la eficacia de los procesos de gestión de riesgos, control y gobierno.

En definitiva, la Auditoría Interna se dedica a monitorear el control interno de una empresa, verificando que los niveles de riesgo sean controlados y que los activos no estén expuestos. Y el Compliance, a su vez, tiene como objetivo prevenir riesgos actuales y futuros, así como el de conducir la aplicación del sistema de prevención de delitos a la mejora continua, preservando su reputación.

Estas dos áreas deben estar diferenciadas, pero trabajar de manera conjunta, ya que se complementan y protegen a la empresa de forma completa. Su éxito no sólo radica en la efectividad de su trabajo, sino en la cooperación y coordinación que ambas tengan.

Similitudes entre el Compliance y la Auditoría Interna

Las funciones de auditoría y cumplimiento normativo tienen en común numerosos aspectos, como los que exponemos a continuación:

  • Deben ser objetivas, independientes y éticas.
  • Requieren el apoyo de la alta dirección.
  • Exigen tener un amplio conocimiento de la operativa de la empresa: áreas, procesos, flujos de información, cadena de mando, controles, sistemas utilizados…
  • Precisan estar al día de los temas relevantes y nuevos escenarios de riesgo que puedan afectar a la empresa, como los planes de igualdad.
  • Requieren conocer tanto el contexto interno de la organización como el externo.
  • Deben realizar un seguimiento de las actuaciones implementadas.
  • Necesitan contar con recursos económicos, materiales y personales.

 

Tanto la Auditoría Interna como el Compliance deben cumplir con sus objetivos, a través de un Plan de Auditoría y un Programa de Compliance.

 

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